Los tiempos de la reconstrucción

Señor director:

Coincido con Pablo Allard en la necesidad de evaluar el avance de la reconstrucción a partir de la experiencia comparada. Como él indica, países como Japón o EE.UU. han fijado plazos de 10 años con organismos especializados en la reconstrucción de desastres naturales. En Chile carecemos de estas instituciones y tenemos menos recursos. Por ello sorprende que se planteen metas de cuatro años a partir de la ambición de las autoridades, que puede ser contraproducente si crea expectativas que no podrán cumplirse.Por otro lado, es incorrecto afirmar que la planificación se está cerrando por haber terminado 130 planes maestros, que siendo muy positivos, no existen en la legislación chilena y no son vinculantes con la inversión ni con los cambios normativos que requieren para ser implementados. Por ello, nada garantiza que su cartera de proyectos se concrete. Antes, deben conseguir financiamiento, licitar ingenierías, modificar planos reguladores, negociar con damnificados y aprobar obras ante organismos públicos y municipios.

Estas complicaciones ya han generado trabas burocráticas, que permiten inferir que la reconstrucción no estará terminada en 30 meses más. Con suerte podríamos aspirar a los plazos de los países desarrollados siempre que como ellos, tengamos leyes e instituciones especializadas en la reconstrucción, que aún no existen y que urge sacar adelante.

Iván Poduje Capdeville