Último tramo de A. Vespucio Oriente se licita en 2016 con un corredor "verde" para buses

MOP, municipios y vecinos del sector acordaron desarrollar proyecto con «túnel de gran profundidad»

Residentes de La Reina, Peñalolén y Ñuñoa revisaron las propuestas de la mesa técnica y escogieron un eje vial de transporte público flanqueado por áreas verdes.

Sería capaz de separar los tránsitos de largo trayecto de los flujos locales, lo que contribuiría a mitigar los tacos.

También ofrecería un parque central para conectar físicamente los barrios de Peñalolén, La Reina y Ñuñoa. Además, podría contar con un corredor de última generación para que el transporte público se desplace a una velocidad que pocas avenidas de Santiago pueden ofrecer hoy.

Estas son algunas de las ventajas que la futura concesión de Américo Vespucio Oriente, entre Príncipe de Gales y Grecia, podría ofrecer a la capital si es que se completa exitosamente el proceso de consulta ciudadana que el Ministerio de Obras Públicas (MOP) está desarrollando en esas comunas y que busca disminuir la -hasta hace poco- sólida resistencia al proyecto.

Con una longitud de casi cinco kilómetros, es el último tramo que aún no se concesiona de la circunvalación capitalina luego que el MOP decidiera separar la iniciativa en dos proyectos. Este, que es conocido como AVO II, y el tramo que cubre poco más de nueve kilómetros entre El Salto y Príncipe de Gales, y que desde marzo pasado está en manos del consorcio Sacyr-OHL, que se lo adjudicó por algo más US$ 1.000 millones.

Puesto a prueba bajo la lupa del vecindario por medio de este nuevo concepto denominado «participación temprana» -que busca desarrollar los avances del proyecto en conjunto con la comunidad en forma previa a su licitación-, AVO II ha recibido elogios de ediles y vecinos, por lo que se encamina a un diseño definitivo, tras la «socialización» de una gama de alternativas urbanísticas.

«Con el proceso, hemos generado la recuperación de las confianzas, que contribuirá a reducir de gran manera los conflictos en procesos posteriores. Esta es una obra que debíamos materializar como un aporte a la ciudad, pero también había que pensar en las comunas aledañas», afirmó el ministro Alberto Undurraga.

El proyecto, que espera iniciar estudios de ingeniería en diciembre próximo, propone un «túnel de gran profundidad», que se caracteriza por la construcción de viaductos subterráneos a una profundidad superior a los 25 metros, lo que permite eliminar las temidas expropiaciones.

Adicionalmente, se incluye la alternativa por la que más se inclina la comunidad contigua, que consiste en una «Gran Alameda». Esta solución contempla un parque central continuo en toda la vía en la misma área que hoy es utilizada por casi 60 metros de vías expresas, de la actual avenida Ossa.

«En general, esta opción es la más compartida, aunque no la definitiva», opinó Gaby Mlinarz, coordinadora vecinal de La Reina, a quien se le vio hace menos de dos años empuñando una pancarta en medio de la vía para protestar contra el proyecto.

Esta alternativa propone también la construcción de un eje de circulación extendida por el centro del parque, lo que permite «esconder» los buses entre los árboles y otorgar un viaje más rápido al reducir a seis la cantidad de detenciones. Estos paraderos seguirán el modelo aplicado en Curitiba, con andenes. Además, el diseño contempla un circuito peatonal separado de las ciclovías.

En este caso, la propuesta compitió con las opciones denominadas «Parque Central» y «Corredor Central», que no fueron bien evaluadas porque generaban roce entre peatones, buses y automóviles.

El urbanista Iván Poduje, principal asesor de la Coordinación de Concesiones del MOP, afirma que si bien no se trata del proyecto definitivo, «estamos frente a un AVO que ofrece un corredor para transporte público integrado al entorno, que mejora en muy buena medida las velocidades de operación de los buses, que aísla al bus de la congestión y que permite que los usuarios vayan al medio de un parque».

Según explicó el coordinador de Concesiones del MOP, Eric Martin, la cartera aspira a culminar la consulta ciudadana antes de diciembre. «De ahí en adelante se harán estudios de ingeniería definitiva, para contar con un modelo de negocios sólido que nos permita comenzar el proceso de licitación durante el primer trimestre de 2016, que para nosotros sería una fecha entre optimista y razonable».

Visión de las comunas

El alcalde de La Reina, Raúl Donckaster, afirmó que el proyecto «más acabado» para el túnel «va a permitir de aquí a fin de año contar con las definiciones finales para la licitación».

Para su colega y contraparte en la comuna de Peñalolén, Carolina Leitao, «todos sabemos que una obra de esta envergadura tiene impactos, la pregunta es cómo se mitigan de la mejor manera. Nuestra evaluación del avance es positiva porque se trata de una buena metodología».

En cuanto a las aspiraciones para «empatar» el avance de las obras, Leitao afirmó ser partidaria de que primero se construya el tramo entre El Salto y Príncipe de Gales, «eso nos permite diseñar de mejor manera las conexiones», aseguró.

El estado de AVO I

Avance

El proyecto, que debiera comenzar a operar en agosto de 2020, se encuentra en pleno desarrollo de los estudios de ingeniería final.

Impacto ambiental

La iniciativa deberá someterse a consulta ciudadana para definir las mitigaciones exigidas por las comunidades aledañas.

Semáforo

De concretarse en solitario, el proyecto terminaría generando un conflicto al despachar sus flujos justo frente a la esquina de Príncipe de Gales con Américo Vespucio.